Noti-Economia: Oro y metales preciosos en 2026: ¿el año de una nueva sorpresa dorada?

El año 2025 marcará un antes y un después en el mercado de los metales preciosos. Tras un rally que pocos anticipaban, el oro cerrará el ejercicio como uno de los activos estrella: ha escalado cerca de un 60 % desde enero y ha tocado máximos históricos por encima de los 4.300 dólares por onza. La plata, el platino y el paladio también han vivido su propio impulso, aunque con menor intensidad.

Pero la pregunta clave es: ¿qué puede ocurrir en 2026?

Un año dorado… literal

Hasta mediados de noviembre, el oro se mantiene alrededor de los 4.200 dólares por onza, un nivel impensable hace apenas dos años. La subida se ha visto alimentada por una combinación muy particular:

• Una política monetaria cada vez más flexible,

• Un dólar debilitado,

• Y una demanda récord por parte de los bancos centrales, que han vuelto a posicionarse como compradores consistentes.

La plata se sitúa en torno a los 54 dólares por onza; el platino ronda los 1.620 dólares, y el paladio se mueve cerca de los 1.480 dólares.

¿Qué puede mover el mercado en 2026?

De cara al próximo año, hay cuatro fuerzas que podrían determinar la dirección del oro y del resto de los metales preciosos:

1. Política monetaria y tipos reales

Si los bancos centrales mantienen una orientación más acomodaticia y los tipos reales siguen a la baja, el oro podría volver a encontrar terreno fértil.

2. Evolución del dólar

Una divisa estadounidense débil suele ser el mejor aliado del metal dorado.

3. Turbulencias geopolíticas y comerciales

Elecciones, tensiones internacionales, nuevos aranceles… cualquier sacudida global tiende a fortalecer la demanda de activos refugio.

4. Compras de bancos centrales

En 2025 ya han adquirido alrededor de 220 toneladas netas en el tercer trimestre. Si mantienen ese ritmo, seguirán sosteniendo el precio del oro.

¿Hacia nuevos máximos históricos?

Las perspectivas apuntan a que el oro podría intentar nuevos récords en 2026 si se mantienen las condiciones actuales.
La plata, por su parte, podría beneficiarse de una potencial reducción en la ratio oro/plata, además del impulso de su demanda industrial, especialmente vinculada a renovables y electrónica.

En cambio, platino y paladio dependerán en gran medida del sector automotriz. Aunque podrían estabilizarse, no se espera que compitan con el protagonismo del oro.

Consejos prácticos para inversores

• Oro como defensa, no como especulación. Su papel clave es la protección patrimonial. Lo recomendable es definir una asignación estratégica y entrar en varias fases en lugar de comprar de golpe.

• Se sugieren formatos líquidos, como lingotes de 1 onza o de 100 gramos, para mantener flexibilidad.

• Plata para perfiles con más tolerancia al riesgo, siempre con visión de largo plazo.

• Disciplina y escalonamiento. Las correcciones pueden usarse para ampliar posiciones sin perseguir el precio.

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