Uruguay pone fin al «paraso fiscal»: las nuevas reglas que lo cambian todo

Uruguay se caracteriz por ser un pas que otorga grandes ventajas en el plano impositivo, que permitieron que muchas personas se transformaran en residentes fiscales uruguayos y que grandes multinacionales abrieran sedes en su territorio.

Sin embargo, el Presupuesto 2026 (que marcar los designios de ingresos y gastos de los prximos 5 aos), pate el tablero tributario y propuso una serie de cambios en los principales gravmenes.

Existen diferentes motivos que llevaron al Ejecutivo a proponer estas modificaciones. La que ms peso tiene es el agujero fiscal que recibi la administracin de Yamand Orsi que, segn las estimaciones oficiales, est en el orden del 4% del PBI.

Las presiones de organismos internacionales -como la Organizacin para la Cooperacin y el Desarrollo Econmico (OCDE)- para convertir al pas en un lugar seguro para realizar inversiones, tambin se suman a la lista.

En este escenario, El Economista dialog con especialistas en tributacin, que explicaron cules son los principales cambios que el Congreso uruguayo est por convertir en ley y que alcanzar tanto a grandes empresas como a los residentes fiscales.

Impuesto global

Uno de los grandes cambios que introduce el Presupuesto 2026-2030 est en lnea con los estndares europeos, que buscan imponer un impuesto mnimo a las grandes compaas que operan a nivel global.

Tal como explic Fernanda Lain, socia de Lain, Fernndez Sabella & Smudt, la idea es que «las empresas multinacionales con presencia en Uruguay paguen un 15% de impuesto a las ganancias por las rentas generadas en ese pas».

Alberto Mastandrea explic que la creacin del Impuesto Mnimo Complementario Domstico (IMCD) aplica a los grupos con ingresos consolidados superiores a 750 millones de euros en al menos 2 de los ltimos 4 aos.

Al respecto, el socio de BDO record que la propuesta -que ya recibi el visto bueno de Diputados- establece que «si la tasa efectiva en el pas fuera inferior al 15%, se activara un complemento a nivel domstico».

El tributarista uruguayo Nicols May aport que el razonamiento que est detrs de esta medida se basa en la idea de que, sin importar el lugar en donde se ubiquen territorialmente las multinacionales, van a tener que pagar el 15 por ciento.

Por eso, el objetivo del Gobierno de Orsi es que «las que estn instaladas en Uruguay abonen el impuesto en el pas y que la casa matriz acredite ese pago para deducirlo del importe global que deber afrontar».

Por otro lado, el socio de MXA plante que se super el conflicto que haba generado la inclusin de empresas que estn en la Zona Franca (hoy excluidas del pago de impuestos), pero que persiste el de algunas firmas (como las empresas de software) que tienen exoneraciones y que con la aprobacin las perderan.

Para Diego Fraga, socio de Expansion Business, la medida «tcnicamente mejora la ‘equidad horizontal’, pero rompe la exencin histrica sobre plusvalas offshore y obliga a planificar timing, documentar bases de costo y hacer calzar crditos cuando hay vehculos interpuestos (fondos, wrappers, trusts)».

Poda en el tax holiday

Posiblemente, uno de los cambios que ms estn analizando los tributaristas, es el que est relacionado con el Tax Holiday. Hoy, quienes accedan a la residencia fiscal uruguaya tienen mltiples beneficios.

Entre ellos, figura la posibilidad de evitar el pago del impuesto a la renta por 10 aos, al que se le sumara el ao en el que obtiene la residencia fiscal uruguaya (10+1). Tambin podan optar por pagar una alcuota del 7% a perpetuidad.

Pero eso se terminar. Al menos as lo manifest Lain, quien explic que la propuesta que puede convertirse en ley prximamente propone un lmite en el sistema de Tax Holiday para quienes hayan ingresado en el «Rgimen de Impatriados».

A partir del 2026, habr una sola alternativa y con requisitos: accedern al Tax Holiday quienes realicen una inversin de US$ 1.000.000 en inmuebles o US$ 100.000 anuales en fondos de innovacin y tecnologa por 10 aos.

«Los nicos que podrn aprovechar los 10 aos sin pagar el impuesto a la renta sin realizar inversin alguna sern los que accedan a la residencia fiscal uruguaya por permanencia (deben estar 183 das en Uruguay para obtenerla)», explic May.

Por otro lado, sostuvo que tambin fija cambios para cuando termine el plazo del 10+1. Las tres opciones disponibles (tanto para los que ejercieron la opcin hasta ahora, como para los que la ejerzan en el 2026) son:

• Pagar la mitad de la tasa (6%) por cinco aos, para lo que debe invertir en inmuebles US$ 500.000 o capitalizar fondos de inversin destinados a financiar proyectos productivos, actividades de investigacin o innovacin aplicables a la produccin.
• Optar por pagar un lump sum anual de US$ 300.000 durante 20 aos (la cifra se reduce a US$ 200.000 para quienes accedieron a la residencia por das).
• Entrar en el rgimen general y abonar la alcuota del 12%.

Al respecto, Fraga asegur que con los cambios, Uruguay seguir siendo atractivo, «pero ya no es un ‘cheque en blanco’: requiere sustancia real (presencia/vida) y un onboarding prolijo (inversin, papeles, calendario)».

Ms impuestos

En las modificaciones tambin se incluyen figuras que antes estaban fuera del alcance del gravamen a la renta. Al menos as lo explic Mastandrea, al afirmar que «el proyecto de ley propone gravar rentas inmobiliarias y las ganancias de capital generadas en el exterior».

Para graficar la situacin, May propuso el caso de un argentino que tiene una sociedad en el exterior (como ser Panam, o en las Islas Vrgenes Britnicas o una LLC en los Estados Unidos) cuyo activo principal es un inmueble en Punta del Este.

«La forma ms ptima de vender ese inmueble, desde el punto de vista tributario en Uruguay, era vendiendo la sociedad, porque se consideraba una renta de fuente extranjera y no estaba alcanzada», indic.

«Ahora lo que importa es el porcentaje o el monto de activos en Uruguay que tenga esa sociedad del exterior. Cuando tenga ms del 50% de sus activos en el pas o dichos activos superen un determinado importe, la venta de la sociedad quedar gravada por impuesto a la renta (12% en el caso de no residentes)», aclar.

Secreto bancario en peligro

Otro de los puntos que llaman la atencin es el relacionado con el secreto bancario, ya que la propuesta propone eliminar la exigencia de autorizacin judicial previa para levantarlo ante un pedido de la DGI uruguaya.

Mastandrea explic que «se baraja como alternativa de negociacin un esquema de ‘silencio positivo’ por el que, si se solicita la autorizacin y el juez no se expide en plazo, se entiende como concedida».

«Para residentes y estructuras con vida financiera en Uruguay, el mensaje es de mayor capacidad de fiscalizacin y tiempos ms cortos de acceso a informacin por parte de la administracin», aadi el socio de BDO.

Bonus track

Por ltimo, Mastandrea sum otro cambio que no es tributario en s, pero claramente es estratgico, ya que est orientado a la atraccin y retencin de profesionales en disciplinas que consideran importantes para el pas.

El socio de BDO record que Uruguay tuvo un rgimen transitorio de atraccin de talento (establecido en la Ley 20.191) para sectores intensivos en conocimiento que caduc en febrero de 2025.

«El proyecto reabre un canal similar para dependientes de empresas o instituciones cientfico-tecnolgicas, de innovacin o servicios globales con actividad regular en el pas», seal.

Y concluy que «en trminos de competitividad regional, el mensaje es claro: se preserva la vocacin de polo de talento, pero armonizando con una base tributaria ms amplia y predecible».

Habr que ver ahora qu es lo que define la Cmara de Senadores uruguayos, que tendr en su poder la decisin de avanzar con el proyecto tal cual lo aprob Diputados o de realizar cambios. Pero algo queda claro: el volantazo est dado.