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Tengo un amigo que es ms chico que yo y que suele hacerme escuchar msica nueva. Generalmente la operacin se realiza bajo los efectos de lamarihuana, lo cual activa los sentidos y genera una mayor predisposicin a la contemplacin.Estar drogado no es una condicin necesaria para poder disfrutar de la msica, ya quela msica es una droga en s misma, pero ayuda cuando uno est queriendo escuchar algo nuevo. El cerebro generalmente tiene un comportamiento conservador y, por lo tanto, si uno quiere someterlo a una experiencia diferente tiene que obligarlo a hacer un pequeo esfuerzo.Si pasa la prueba, las recompensas terminan siendo ms que gratificantes.

Primero, mi amigo tecle en la computadora y me mostr sets de msica electrnica, ms especficamente, material deKtrina, una DJ depsytrance. En el ltimo tiempo escuch a varias personas que suelen sumergirse en ese tipo de msica que generalmente —aunque no siempre— est asociado al uso dedrogas sintticas. Elementos que se distribuyen en formato de pastillas o polvo y que le permiten a los bailarines adentrarse en laabstraccin que ofrece el trance musical. A la vez que les proporcionan enormes cantidades de energa que les permiten mover sus cuerpos hasta el amanecer, o incluso, hasta el medioda del da siguiente.

Una persona me cont que recientemente asisti al festival depsytrance O.Z.O.R.A., que se celebra enHungra. Durantediez das consecutivos, los participantes se sumergen por completo en el universo de la msica electrnica acelerada, en un predio enorme con mltiples escenarios y DJs. En ese trance colectivo, los participantes dejan en un segundo plano necesidades bsicas tales como elbuen descanso, laalimentacin adecuada y lahigiene personal.

Elpsytrance es un subgnero de la electrnica que se caracteriza por inducir a las personas en estado alterado de conciencia, a partir de la ejecucin de unpulso mucho ms rpido que otros subgneros y que oscila entre los140 a 150 BPM (beats por minuto).

Para controlar al pblico en esas condiciones durante tanto tiempo el DJ debe controlar suritmo cardaco. Como ilustran los personajes interpretados porZack Efron yEmily Ratajkowski en la pelculaWe Are Your Friends, para que un DJ haga que las personas en una fiestasalgan de sus cabezas y entren en sus cuerpos, el DJ debe usar los botones de la lnea inferior de su bandeja para imponer un ritmo y una lnea de bajos atractiva.

El reggae tiene 60 BPM. El dubstep 70 BPM. El house tiene 110-130 BPM. Para el personaje interpretado por Zack Efron,128 BPM es elnmero mgico para controlar el ritmo cardaco de los bailarines y guiarlos cancin a cancin.

Pero la exposicin de mi amigo sobrepsytrance dur poco, entonces pasamos a otro gnero que frecuentamos ms: eltrap. Eltrap es un subgnero delrap (o delhip-hop, si se quiere ser ms preciso) que suele tener un ritmo ms lento (60-70 BPM vs 90 BPM), pero que puede sonar en la oreja del lego musical ms rpido de acuerdo a cmo se constituyan otros elementos que se le aadan albeat, como pueden ser loshi-hats ysnare rolls (redoblantes). Esta base rtmica permite que los cantantes impriman por encimasonidos guturales yrimas, generalmente vinculadas adrogas y arelaciones sexuales.

Pasamos porEl Doctor, un cantante argentino contemporneo conocido por sus canciones«30 Mil Pe$os», una pieza signada por la repeticin de una suerte de ladrido que antecede a la frase«Otra vez estoy otra vez tomando falopa / Me encanta maldita falopa», o«NI MAKRI NI KISHNER», una oda a su origen matancero en el cul lagrieta poltica no es ms que un invento de los «chetos«, a los cules mira con desconfianza:«Ni Macri ni Kirchner, ah / Ni Che Guevara ni Hitler / Ni Steven Spielberg»

Con los hombros encogidos, movimiento espstico de manos y rodeado de un grupo de bailarines, El Doctor representa la esttica clsica del trap en el videoclip de «30 Mil Pe$os».

—Sabs qu? Tengo algo para mostrarte. Es una boludez, pero est bueno —sentenci mi amigo.

Y puso un video que le recomend el algoritmo de alguna plataforma en el cual se vea a un tro de cantantes conbuzos oversize, encapuchados conpasamontaas yantiparras de ski. Su aspecto eradiablico pero atractivo. Se notaba que el videoclip era debajo presupuesto, pero por alguna razn eso lo hacamuy atractivo. La pieza saba articular estratgicamente el uso de laedicin al comps de losbajos que conducan al ojo del espectador por situaciones que saltaban de un lado al otro.

Se trataba de la cancin«Memas en el parking» del grupo uruguayoTussiwarriors, formado porChurrito,Double Tonka yPenjamin Zaza en2023. De un modo, si se quiere impune, los cantantes no revelan susnombres ni suedad.

Tussiwarriors, es decir, losguerreros del Tussi, refiere a unadroga que se realiza a partir de la mezcla de restos decocana,ketamina,MDMA, entre otras sustancias, y se presenta en un simpticopolvo rosado.

Representacin de Tussiwarriors de la droga que les da su nombre en el videoclip de «Fumo y manejo».

Pero lo que ms me sorprendi de la banda no fue la alusin a lasdrogas, ni alsexo, ni a lanoche o lafiesta, sino a que en sus canciones hacenreferencias a relaciones sexuales con menores de edad:«A 200 en una zona escolar», «A tu wacha le dicen (…) porque es re menor», «Tengo el estudio lleno de menores / Me dicen que son de tercero»

Haciendo memoria,creo nunca escuch en alguna cancin una referencia tan explcita a la pedofilia y que pase desapercibida; ms all de que se entiende que en la propuesta artstica de la bandagravita un cierto halo de irona.

Todo esecctel bizarro me gener una conmocin tal que empec a escucharTussiwarriors ms seguido.

Referencias a la pedofilia en el videoclip de «Memas en el parking» de Tussiwarriors.

—Todo bien si quieren hacer humor, pero eso no es msica. No te olvides que soy un baterista de jazz —dijo otro amigo cuando se lo mostr.

A los pocos das me escribi mi amigo para anunciarme queTussiwarriors vena a la Argentina y que iban a tocar enGroove, enPalermo. En medio de la euforia decidimos ir.

Generalmente cuando asisto a recitales detrap me encuentro con gente ms joven que yo. Pero esta vez haba personassignificativamente ms chicas. Escuch a varios hacer comentarios sobre elcolegio e, incluso, asistieron al recital un grupo bastante grande depadres que acompaaron a sus hijos y se ubicaron en el fondo.

En el escenario, los integrantes deTussiwarriors se movieron como una banda depunk, provocando al pblico que hacapogo y se saba casi todas las letras. Con mi amigo nos preguntamosqu podran llegar a pensar los menores de edad sobre las menciones que las letras hacen a:«Planchas, planchas y planchas», «Porro con base»,«No me duermo ni kon melatonine»,«Tu wacha sube fotos desnuda al feed / La ma tambin, pero a LinkedIn», o loschistes sobre el sfilis que hacan los cantantes durante el show. Por no mencionar qu podran haber pensado los padres cuando escucharon frases como:«Fumo y manejo / Le robo guita a mi viejos / Desde pendejo»

Semanas ms tarde,Tussiwarriors anunci la salida de su nueva cancin: «A pelo». Una nueva propuesta en la queencontr un lmite.Ya no me pareci ni gracioso ni interesante.

La cancin busca promover lasrelaciones sexuales sin proteccin. En una escena, se los ve aChurrito, Double Tonka y Penjamin Zazaprendiendo fuego a preservativos; seguido de unacampaa de marketing para promocionar la cancin en la cul le preguntan a la gente si se cuida a la hora de tener sexo ycelebraban a los que no lo hacan.

Capaz Tussiwarriors busca romper los lmites y concientizar al pblico haciendo uso de la stira. O, tal vez, son unos guarangos.O, simplemente, todava no estamos preparados para entenderlos.



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